La fiesta consiste en que los fieles recorren en grupos las calles de León, y se detienen ante cada altar de la Virgen que encuentran a su paso, para entonar cantos, rezos, y gritar “¡¿Quién causa tanta alegría?!”, responder “La Asunción de María”, y a cambio reciben la tradicional “Gorra” de los dueños del sagrario, generalmente dulces, frutas o alimentos.